Investigar y el desarrollo profesional de alumnos, bazas de las cátedras andaluzas de la ‘Fundación Cepsa’ 11 diciembre 2017
Abrir nuevas líneas de I+D+i; fomentar las existentes sobre el sector químico, el petrolero, energético y el medioambiental, así como el desarrollo personal y profesional de los alumnos, mediante la potenciación de las habilidades que hoy día más valora el mercado laboral, la organización de cursos y el seguimiento de doctorados, estancias y promoción de los proyectos de fin de carrera, son las principales bazas de las cátedras ‘Fundación CEPSA’ conveniadas con la Universidad de Huelva (UHU), la de Cádiz (UCA) y la de Sevilla (US).
Desde que se pusieran en marcha en 2003, 2005 y 2009, respectivamente, han sido centenares de alumnos los que se han beneficiado de las distintos cursos, actividades, líneas de investigación y conferencias que CEPSA ha potenciado en estos centros universitarios con el fin de obtener sinergias para suplir necesidades de la compañía, a nivel de investigación, y de los propios alumnos.
En declaraciones a Europa Press, los directores de las cátedras en cada universidad, Agustín Galán, en la de Huelva; Benito Navarrete, en la de Sevilla, y David Sales, en la de Cádiz, coinciden en remarcar que “en último término, el mayor beneficiario es la sociedad”.
“Estamos comprometidos todos los directores de las cátedras para que el nivel de satisfacción de los alumnos siga creciendo y poder servir a los intereses de la compañía”, remarca Benito Navarrete, quien asegura que otro de los objetivos “es que el conocimiento se quede aquí, en Andalucía”. “Me da mucha satisfacción cuando veo en los cursos a los ponentes, que son técnicos de CEPSA, y más de la mitad han sido alumnos de esta casa, que han vuelto tras estar algunos en el extranjero formándose”, ha asegurado.
Por ello, los principales objetivos de estas cátedras son la formación, la investigación, la transferencia tecnológica y la difusión, relacionados con la energía, el petróleo, el medio ambiente y cualquier otra disciplina de mutuo interés entre el alumnado y la empresa, de hecho los propios alumnos pueden proponer distintas actividades y muchos de ellos realizan prácticas en centros de la compañía.
De hecho, cada cátedra se marca sus propios objetivos. La de la UHU, cuyas relaciones con CEPSA se remontan a 20 años atrás, se vertebra en torno a dos ejes fundamentales: por un lado, el fomento de la investigación en temas afines a la actividad de la compañía energética y, por otro, a favorecer el desarrollo personal y profesional de los estudiantes de la UHU tratando de mejorar sus posibilidades de empleabilidad.
PROGRAMA 10C
Al respecto, Agustín Galán ha precisado que en cuanto al desarrollo personal, el programa estrella continúa siendo Alumno 10C. “Es pionero en el marco de la universidad española con esta orientación y en el mismo se premia a los estudiantes que más destacan por su formación integral”, ha asegurado el director, quien destaca a su vez las relaciones de la compañía con la ciudad de Huelva desde los años 60 a través de sus centros de trabajo en La Rábida, y “la cátedra no es más que ese reflejo”.
En el citado programa, que ha podido beneficiar desde que se instauró en 2008 a unos 900 alumnos y del que están tomando nota las otras dos cátedras, se trabajan las competencias más demandadas por la empresa de un modo práctico y vivencial e inculcando un fuerte compromiso social. “El mercado va cambiando y lo fundamental ahora no es tanto el contenido, que se da por hecho, sino el desarrollo de estas habilidades”, asegura Galán.
Asimismo, se procura alargar la tutela de la cátedra más allá del programa formativo, potenciando la estancia y prácticas en el extranjero de los alumnos, estimulando su incorporación a programas de emprendimiento en instituciones expertas en este ámbito o facilitándoles su primera experiencia laboral en alguna de las empresas vinculadas el proyecto.
Por otro lado, la UHU, en el amparo de la cátedra, ha creado los premios ‘Sapere Aude’, que tienen como objetivo valorar y estimular la labor creadora, emprendedora e investigadora del alumnado a través de artículos de ensayos e investigación.
LA CÁTEDRA EN LA UCA
Por su parte, la cátedra ‘Fundación CEPSA’ en la Universidad de Cádiz basa su actividad en tres ejes fundamentales: la formación, la transferencia y la búsqueda de líneas de investigación, que pasa por poner en contacto, en campo, profesores significativos y grupos de investigación, con responsables de unidades y departamentos de CEPSA relacionados, al objeto de fomentar relaciones, detectar posibles líneas a desarrollar o colaborar en la resolución de problemas.
El director de la cátedra en la UCA, David Sales, ha precisado que la misma “está obteniendo más músculo” en el ámbito de la investigación, de hecho en la actualidad hay más de una docena de grupos que podrían dar respuesta a las necesidades de la refinería Gibraltar San Roque para “mejorar procesos productivos, el cuidado al medio ambiente y hacerlos más eficientes”. A su vez, desde la cátedra se va a cofinanciar el contrato de una persona para que haga su tesis doctoral en la empresa durante tres años.
Entre las principales actividades, Sales destaca los cursos online en abierto (MOOC) sobre la industria del petróleo centrado en el cuidado del medio ambiente; la entrega de los premios Cátedra Fundación CEPSA 2017 que desde el año 2006 tienen el objetivo de reconocer y fomentar los mejores trabajos científicos en forma de artículos, patentes de invención y modelos de utilidad, y trabajos finales de estudios universitarios, y los encuentros bilaterales entre investigadores y responsables de departamento para ver distintas líneas de investigación.
LA CÁTEDRA EN LA US
Por su parte, la cátedra ‘Fundación CEPSA’ en la Universidad de Sevilla, con la que la compañía mantiene una estrecha relación desde hace 50 años, se constituyó hace ocho en la Escuela Técnica Superior de Ingeniería (ETSI) con el objetivo principal de promocionar el estudio de los procesos de producción y el uso de combustibles, productos petrolíferos y derivados.
Su director, Benito Navarrete, ha destacado que el convenio se ha abierto a la participación de alumnos de otros centros, de hecho el pasado curso la ETSI contó con la colaboración de CEPSA para la revisión de los planes de estudio del Grado en Ingeniería Química (GIQ) y el Grado en Ingeniería de las Tecnologías Industriales (GITI), lo que propició la inclusión en el nuevo plan de estudios del GIQ de una asignatura dedicada íntegramente al refino, complementada con otra de Ampliación de Tecnología Química en la que se incluyen temas de Petroquímica.
Navarrete ha destacado a su vez los cursos de refino de petróleo, que “tienen mucho éxito”, así como el ámbito de la investigación con la puesta en marcha de proyectos “muy interesantes”, como es la búsqueda de aditivos para combustibles que pueden servir de aprovechamiento de residuos o subproductos de la empresa petroquímica que no tienen salida.
Al respecto, Navarrete ha señalado que “aunque hoy día a nivel social la industria petroquímica no tiene buena prensa y el alumno que llega viene pensando en desarrollar su carrera profesional en las nuevas tecnologías, en las renovables o en la energía limpia, este cambio de paradigma no se produce de un día para otro”. Por ello, aboga en “centrar los esfuerzos en utilizar el combustible bien y de forma limpia porque lo vamos a seguir utilizando durante mucho tiempo”.
Por último, el director de la cátedra en la US se ha referido al impulso de tesis doctorales y trabajos de fin de carrera, así como a las inicitivas interesantes que los alumnos proponen, como el desarrollo de un coche de fórmula 1 –que es una de las que están potenciando–, y ha asegurado que “satisface mucho que lo que se invierte para que puedan realizar este trabajo vea su fruto recompensado en la formación”.